¿Cómo pulir piedras semipreciosas?
Los amantes de las piedras, las gemas semipreciosas y la geología en general, se habrán preguntado alguna vez si es posible pulir las rocas que se pueden encontrar en la naturaleza para conseguir un acabado mejorado, brillante y profesional.
La respuesta es sí, ¡puedes realizar el pulido de tus piedras semipreciosas desde la comodidad de tu casa! Además se trata de un proceso muy relajante y un excelente hobbie para dedicar tus horas libres a algo que te apasiona.
¡En este post te contamos cómo realzar la belleza natural de tus gemas y cómo puedes conseguir resultados profesionales con tus propias manos!
Pasos para pulir tus piedras preciosas
Dependiendo del método utilizado para pulir nuestras gemas preciosas y semipreciosas, se llevarán a cabo más o menos pasos para completar el proceso, aunque de manera general los podríamos resumir en los siguientes:
- Primera pasada: suele hacerse con un grano más gordo, con el objetivo de eliminar la primera capa de la piedra y darle una forma y tamaño adecuados.
- Grano mediano: en esta fase nuestro objetivo será deshacernos de los arañazos más profundos de nuestra gema.
- Grano pequeño: aquí emplearemos unos materiales menos abrasivos, ya que nuestro objetivo será quitar los pequeños arañazos que puedan permanecer en la superficie de la piedra.
- Pulimento final: normalmente, se aplica una última capa para realzar el brillo natural de la gema o cristal.
Estos pasos son tan solo una orientación, ya que los pulidores profesionales suelen tener 6 e incluso más pasos hasta conseguir un resultado apto para la venta de las gemas.
Métodos para pulir piedras semipreciosas
Existen diversos métodos para pulir tus piedras preciosas. Algunos son más sencillos que otros, otros requieren de la compra de maquinaria y con algunos tan sólo necesitarás papel de lija de diversos tamaños para conseguir una piedra semipreciosa con un aspecto espectacular.
Tambor de roca o pulidora rotatoria
Se trata de un método relativamente sencillo para pulir y dar brillo a nuestras gemas y piedras semipreciosas. Es importante antes de proceder con esta técnica, asegurarse de que la gema en cuestión es apta para someterse a un pulido de este estilo, y que es lo suficientemente resistente como para introducirse en el tambor junto a los agentes granulados de pulido.
Normalmente, el proceso para pulir una piedra semipreciosa con el tambor de pulido es introducir la gema en el pulidor y añadirle el granulado, más grueso para un primer pulimento y más fino para los acabados finales. El tambor girará con las gemas en su interior y pulirá su superficie de forma autónoma.
En el paso final podemos añadir un agente abrillantador para un resultado más reluciente y un mejor acabado.
A mano con papel de diamantes
Seguramente ya sabrás que solo un diamante puede rayar otro diamante, y es que se trata del mineral más duro de toda la corteza terrestre. Es por eso que el papel de diamante para lijar es uno de los mejores materiales para pulir piedras semipreciosas de una forma sencilla y a mano.
Requiere, evidentemente, de algo más de tiempo, pero es ideal para trabajos más delicados o minerales que no podrían soportar la intensidad de otros métodos de pulimentos mecánicos.
Nuestra recomendación es utilizar papel de lija de grano 80 para una primera pasada, un papel de 180 para eliminar arañazos profundos y uno de 600 para acabar de alisar la roca.
Posteriormente, deberemos aclarar la roca con un trapo húmedo y le quitaremos todo el polvo restante. Para sacarle el brillo final, podemos aplicar un poco de pulimento en un paño ligeramente humedecido, y ¡voilà! Conseguiremos un resultado prácticamente profesional con un mínimo de inversión en materiales.
Dremel
Es una técnica algo más avanzada, pero muy efectiva para pulir rocas en poco tiempo. ¡Eso sí! Recomendamos utilizar este método tan solo si ya tenemos algo de experiencia con este tipo de herramientas tipo torno y hacerlo con la máxima precaución para evitar cualquier posible accidente.
Para realizar el pulimento de nuestra piedra semi-preciosa deberemos utilizar un cabezal adecuado a este propósito, preferiblemente de cepillo de cerdas con un compuesto de diamantes para lograr el mejor resultado posible.
La ventaja del Dremel es que se trata de una herramienta bastante polifacética, que nos ofrece la posibilidad de equipar con diversos tipos de cabezales para conseguir un resultado final óptimo y muy profesional.
Máquina de cabbing
No es un método demasiado popular entre los usuarios amateurs al pulimento de rocas, ya que requiere de una importante inversión para la compra de esta máquina.
Tan solo lo recomendamos para personas que estén pensando en convertir su afición en un posible negocio o que por diversas razones, deban pulir una gran cantidad de piedras preciosas y semipreciosas de forma habitual.
La principal ventaja de la máquina de cabbing es la facilidad de uso de la máquina y la eficiencia de todo el proceso de pulimento.